Dibujos animados...

Ciertamente uno de mis mayores placeres es leer, pero ver monitos animados le sigue muy de cerca... Una de las típicas conversaciones cuando uno se va haciendo viejita es sobre los programas de TV que veíamos cuando éramos chicos.... Uf!!! y yo los veía todos... Desde los ultra mega mamones y cebollas como Candy y Remy, con los que lloré a moco tendido porque se moría Anthony y el abuelito de Remi... Pasé por los de ciencia ficción como Robotech, El galáctico, el Show de los Robots, etc... También veía los violentos de última generaión como Los caballeros del Zodiaco y Dragon Ball. Y como todo el resto de los mortales tb veía, Hi-Man, Los simpson (bueno, este hasta ahora jajajaja), la pequeña Lulú, Los Picapiedras, Los Supersónicos, etc etc etc...
En honor a mis largas horas de TV escribo estas líneas... y los invito a escribir sobre los monitos de ayer y hoy...

Fobias...

Unas cuantas líneas sobre los miedos... No recuerdo haber sido una niña miedosa, ni siquiera recuerdo pesadillas ni haber despertado en la noche con ganas de acostarme con mis papis, me encantaban las películas de terror, pero se apagaba la tele y terminaba el show... otra cosa era mi hermano, que se la pasaba toda la noche preguntando: " ¿Cierto que los payasos asesinos no existes?"... por su culpa me restringieron la tele en la noche!!!! jajajjajaja

Otro tema recurrente de miedo cuando una es pequeña es la "oscuridad", pero se imaginan que habiendo vivido toda mi vida a dos cuadras del cementerio y pasando sola por mi patio a oscuras, la oscuridad no era un problema para mí... pero sí para mis primas 5 años mayores que yo... Aún recuerdo cuando coludida con una de mis primas encerramos a su gemela en una pieza a oscuras... la mandamos a encender una luz al final de una habiatación mientras nosotras le echábamos porras desde la puerta, cuando la pobre llegó a la mitad de la habitación, le cerramos la puerta... ¡Qué malassssss! (Mº José, ¿nos perdonaste?)jajajajjaj

Pero sin duda si hay algo que es capaz de hacerme palpitar más rápido el corazón, de crear un globo en mi pecho y llevarme a punto de las lágrimas son: los ratones. ¿Cómo sucedió? no lo sé, pero pasé del asco común a los roedores a la más arraigada de las fobias... Imagina que la Caro aún recuerda aquella vez que caminando por calle brazil en Valpo, se nos atravezó en el camino un ratón muerto, el grito que di hizo que varios caminates se giraran a observar el espectáculo...

Bueno, los invito a hablar sobre sus temores...

Cumpleaños...

Estas líneas se las dedico a los 25 años de amaneceres que me han visto durante mi vida... también a esos atardeceres que marcaron el fin a días de juegos, sueños, penas y alegrías...

Un cuarto de siglo ha trancurrido ante mis ojos, historias y más historias... y en estas palabras sólo puedo agradecer por todo lo que he vivido, que para bien o mal me han convertido en lo que soy... Un abrazo a todas mis personas queridas... que no caben en este espacio como para nombrarlas a todas, porque su cariño, su consejo y apoyo son mis más grandes tesoros...

Para decir adiós...

Muchas veces las palabras sobran... porque no son capaces de expresar todo lo que sentimos, no son capaces de transmitir cuan feliz, cuan triste, cuan desesperada, cuan ilusionada estoy... De alguna forma es raro que lo diga yo, que escribir es mi forma de comunicarme... pero con los años he aprendido que hay cosas que no suenan mejor con palabras... ¿Cómo decir adiós sin que suene vacío? ¿Cómo decir te quiero sin que parezca sólo una frase?

Puedo describir con palabras las situaciones, intentar tomar una foto de los hecho, pero sólo será eso, una imagen detenida, incapaz de transmitir cuanto te quiero mientras te digo adiós, cuánto me cuesta pensar que es un hasta pronto y que las cosas no se quedarán congeladas sólo en mis recuerdos, en los tuyos y en aquellos que nos vieron... pero que no serán futuro, sino sólo huellas de nuestro pasado...

Para decirte adiós: te miro a los ojos. Quiero que los lleves en tu memoria, que guardes esta mirada silenciosa que te está diciendo cuánto te quiero... Para decirte adiós: sólo te miro mientras te alejas...

¿Qué necesito para viajar?

Dentro de una larga lista de estresores que me hicieron estudiar alguna vez para psicología, estaban los viajes... Esto provocó la risa entre nosotros, viajar es sinónimo de vacaciones, ¿quién se puede estresar en las vacaciones?

Otra cosa es tener que armar la maleta, eso sí que estresa a cualquiera... sobretodo si se viaja en meses en que no se sabe si hará frío, calor o lloverá...

Durante todos estos años de viajes frecuentes entre Coquimbo y Viña he desarrollado la práctica para armar una maleta en sólo 15 minutos, sin olvidar nada...

Viaje Viña-Coqbo: un par de pantalones, unos chalecos, poleras, entre ellas una "polera de baile", ropa interior, un cosmetiquero, las llaves de mi casa de coquimbo, algún apunte que llevo sólo para calmar la conciencia de no estudiar, porque siempre vuelve sin ser leido... y estoy lista...

Viaje Coqbo-Viña: los 15 minutos que me llevó hacer la maleta de ida se multiplican por tres para hacer la de vuelta. La ropa sigue siendo la misma. Pero ahora aparte del apunte, van un par de libros que desviarán mi atención del estudio por lo menos un par de semanas. Pero definitivamente lo que hace la diferencia entre los 3 kilos de ida y los 20 kilos de vuelta de la maleta: es la comida. Bajo una sonrisa con cejas de casita, y una voz sufrida mi mamá dice: "Es que estás tan flaca... apuesto que no comes bien... Llévate unas cositas..." Y las cositas, se transforman en arroz, fideos, atún, leche, cereales, fruta, verduras, galletas... etc etc... en ese momento mi bolso trae más cosas que el carrito del supermercado mensual... Entonces, ya no encuentro bolsillo que cierre, y van apareciendo bolsitos extras y bolsitas para llevar "arriba"... y poco a poco me voy enojando... pero en el fondo me encanta que se mende cositas... jajjajaja

Aunque sé que pronto pasaré nuevamente por eso... estoy muy feliz de viajar a mi casa... pucha que los echo de menos... con maleta liviana o pesada... jajajaja

Autoretrato...

Cuando se acerca el día de mi cumpleaños, inicio un período de nostalgia del tiempo transcurrido, es hora de los balances. Un año desde la última vez que revisé quien era, y la pregunta sigue ahí: ¿quién soy?

Así que hoy escribiré un pequeño resumen de quien soy, y así quizás algunos puedan entenderme un poquito mejor...

- Soy una coquimbana de corazón, que en este último tiempo añora mucho volver a su casa...

- Soy una persona sincera y discreta, así que soy buena para dar consejos y escuchar confesiones...

- Tengo unos muy buenos amigos a quienes quiero mucho, y a quienes les agradezco por aguantar mis defectos, por hablarme con sinceridad y estar ahí cuando los necesito...

- Soy mandona, un poco mal genio y perfeccionista, lo sé, y lo asumo como mis peores defectos, pero trato de mejorar...

- Tengo gustos sencillos, me gustan casi todos los colores a excepción del naranja (al menos en ropa, jajaja), me encantan todos los chocolates desde los de "chocolatines" de $10, me encantan las flores, sobretodo si es la plantita viva...

- Soy soñadora, siempre construyo castillos de arena, pero no vivo en ellos, en otras palabras, a veces me construyo un mundo paralelo, pero siempre tengo los pies en la tierra, al menos 23 horas al día, unos minutitos de desconexión son terapéuticos jajajaj

- Soy dormilona, y lo máximo para mí es dormirme a las 8 de la mañana cuando empiezan a cantar los pajaritos...

- Soy buena para hablar, en otras palabras un bozal sería un buen ragalo...

- Soy ordenada, pero floja para ordenar, así que no es muy extraño ver un alto de ropa tirada en mi pieza, pero una vez a la semana todo vuelve a su lugar...

- Me encanta leer y escribir, si no se han dado cuenta, ajjajaja...

- Me encanta bailar y algún día pienso tomar clases...

- Como buena porteña me encanta el agua, sentarse a orillas del mar a contemplar las olas me parece un buen pasatiempo, pero sumergirme en la playa o en la piscina es sin duda uno de mis mayores placeres...

- Me gusta pintar, tejer, bordar, cocinar y hacer manualidades, en general todas esas cosas que signifiquen horas de ocio escuchando música o televisión, y algún tipo de manualidad...

- Me gusta escuchar música, pero no sé nada de música, tengo pésimo oído musical, soy muy mala para recordar las letras de las canciones y no entiendo la música en inglés, todo un desastre, pero me gustaría aprender jajajaj

mmmm... Sin duda me faltan miles de características, pero como no se me ocurren más, espero que quienes lean esto me ayuden a completar este autoretrato mencionando su visión de mí...

Obligaciones indeseadas...

Existen cosas que no nos gusta hacer, pero estamos obligados a hacerlo... Así es que hoy dedicaré unas líneas a esos momentos en que TODO parece más interesante, más entretenido y más urgente que hacer lo que no queremos hacer...

A todos nos pasa que cuando tenemos que estudiar sobre un tema que no nos agrada, coincide justo con el momento adecuado para ordenar la pieza, querer ir al cine, estudiar otra cosa, hacer tareas, salir o escribir en el blog... pero existe una vocecita que nos recuerda que cierta materia nos espera, que aunque hagamos nuestro mejor intento por olvidarnos de ella, ahí está, acechándonos segura de que tarde o temprano, y generalmente tarde, tendremos que sobreponernos y tomar los libros y tratar de memorizar lo mínimo para pasar el examen...

Luego viene la culpa. ¿Por qué no estudié más, mejor o algo? preguntas que quedan suspendidas sin respuestas, porque no la hay. Nada puede justificarnos, tuvimos tiempo, tuvimos el material, pero nos faltaron las ganas... muchas veces ni siquiera podemos decir que la materia nos desagrade profundamente, pero ahí estamos sin mover un músculo por mejorar... y aunque nos proponemos estudiar más para la siguiente vez, invariablemente ocurrirá otra vez... ¿será parte del karma del estudiante?